ENSAYO CIENTIFICO

LLUVIA ACIDA

La lluvia es muy importante para nosotros. Todos los seres vivos necesitan agua para vivir, incluidas las personas y las plantas que nos proporcionan alimento. La lluvia nos suministra el agua que necesitamos, pero esta fuente de vida se está envenenando debido a la contaminación. La contaminación procede principalmente de los combustibles que se queman en los coches, las viviendas, las fábricas y las centrales térmicas, y se combina con la humedad atmosférica para formar ácidos que después caen al suelo con la lluvia. La lluvia contaminada atenta contra la salud de las personas, destruye la vida en las lagunas, lagos y ríos y daña o mata a los árboles y estropea a los edificios.




El agua de lluvia típica tiene un pH de cerca de 5 a 6. Esto significa que de forma natural no es neutro, es un líquido levemente ácido. Durante la precipitación por ejemplo agua de lluvia disuelve gases como dióxido de carbono y oxígeno. Sabemos las industrias emiten grandes cantidades de gases acidificantes, por ejemplo los óxidos sulfúricos y monóxido de carbono. Estos gases también se disuelven en el agua de lluvia. ¿Causa esto un cambio en el pH de la precipitación? Claro, el pH de la lluvia bajará a un valor de o por debajo de 4 lo que significa que cuando una sustancia tiene un pH por debajo de 6,5, es ácida. Cuanto más bajo es el pH, más ácida es la sustancia.




Podríamos decir que la lluvia ácida es una consecuencia directa de los mecanismos de auto limpieza de la atmósfera. Esta lluvia depende de la mezcla de contaminantes, pero, ¿Qué contienen estas mezclas? Cuando los combustibles fósiles arden y los minerales que contienen azufre se funden, este se convierte en dióxido de azufre gaseoso; además, las elevadas temperaturas de la combustión provocan la oxidación de nitrógeno atmosférico y la consiguiente formación de óxido de nitrógeno y en menor grado de dióxido de nitrógeno. Cuando estos contaminantes primarios salen de sus fuentes, la concentración atmosférica de los mismos disminuye: al mezclarse las nubes (penachos) de aire contaminado con el aire limpio, al perderse los contaminantes cuando se depositan y al transformarse algunos de ellos.




Existen agentes que ocasionan la lluvia ácida como lo es la producción de energía que es la fuente de mayores emisiones de contaminantes a la atmósfera, seguida del transporte y otras actividades industriales.




Una de las mayores preocupaciones por el impacto de la lluvia ácida sobre los ecosistemas acuáticos se centra en los efectos sobre la población piscícola. La creciente acidificación de los lagos ha ocasionado la muerte millones de peces y el agotamiento de las reservas. Los efectos perjudiciales se han atribuido a disminuciones repentinas del pH; sus descensos graduales con el tiempo, provocan una acidez prolongada que obstaculiza la reproducción científica y el desove, con lo cual su fauna disminuye y se reproducen las especies más tolerantes. También podríamos considerar otro problema es que la deposición ácida conduce a la movilización de metales tóxicos, especialmente el aluminio, y este puede ser otro factor que contribuye a la mortandad de los peces, causando daños a los ecosistemas terrestres aumentando la acidez del suelo, disminuyendo la cantidad de nutrientes, movilizando los metales tóxicos, eliminando importantes sustancias del suelo y cambiando su composición.




Sucede que excesivas cantidades de cationes de hidrógeno introducidos en el suelo por precipitación ácida pueden cambiarse por cationes de metal pesado introduciéndose en el suelo y las corrientes de agua. Los componentes metálicos pueden contaminar a los peces comestibles y el agua potable y así, pasar a las personas y de esta forma causar grandes efectos secundarios sobre la salud humana.




Podemos evitar la lluvia ácida si las calderas de nuestras casas, las fábricas, las centrales térmicas y los automóviles contaminan menos la atmósfera. En cualquier caso, tenemos que actuar deprisa, porque el problema de la lluvia ácida se está agravando y junto con este problema el deterioro de los ecosistemas y la vida de toda la humanidad.